Cuando propuse a mi grupo literario hacer un recital
de poesía en el cementerio, la mayoría estuvo de acuerdo. Sin embargo, para un
grupo de artistas cuando se propone hacer un evento y ponerse de acuerdo no es
tarea fácil, requiere una paciencia especial pero ante todo tener muy claro los
objetivos. Con esta convicción, esa “vibra”, como dicen…, es necesario
proponerlo sobre el papel para cumplir con una agenda. De esta forma, hay más
seriedad, incluso, hay firmas de por medio. Si alguien del grupo no puede
asistir, entonces nos vemos obligados a cumplir la agenda para seguir adelante.
Recuerdo que en nuestro primer recital en el
cementerio, luego de eso, creo, que se marcaron nuevos destinos. Desde esa
fecha en lo personal me inspiró para reflexionar sobre mi trabajo literario
desde una nueva perspectiva. Después de
la primera visita al cementerio hubo varios cambios en el grupo POETALICA. Sentí desde ese día que debíamos volver, en
lo que ya estaba coincidiendo con mis compañeros. Es como si hubiéramos recibido
un mensaje.
El primer recital en el cementerio fue casi como un
ritual en que mostramos nuestro respeto por una existencia que se encuentra
supuestamente en reposo. En lo personal mi corazón estuvo lleno de afecto y
respeto por aquel día en cada momento. Pero no llevamos ofrenda como rosas o
algo así.
Al día siguiente más de un integrante de Poetalica
experimentó cierto malestar que prefiero no mencionar. Sin embargo, ir a ese lugar con la misión de
recitar poesía nos hizo realizar un culto a las almas que se encuentran
descansando ahí. De esta forma ya estábamos inquiriendo con todas las culturas
antiguas que era al rendir respeto a los seres del otro mundo como si hubiera
alguna posibilidad de que ellos puedan influenciar en nuestras vidas.
Todas las culturas le dan un significado ritual a la
muerte de los seres queridos. La meta del culto es asegurar el bienestar en la
nueva existencia de los ancestros y su buena disposición hacia los vivos. La función social del culto a los ancestros
es cultivar valores familiares, como la piedad filial, lealtad a la familia y
continuidad del linaje. Probablemente sobre la continuidad que estamos hablando: al linaje de “poetas de
poetas” de nuestro querido Perú. La figura de Martin Adán y el entusiasmo del
grupo literario Poetalica fue el motivo de nuestra visita, gracias a la
iniciativa de Miguel Fegale quien propuso rendirle este sencillo homenaje. Hecho
que coincidió conmigo porque hace más de año había hecho una pintura del gran
poeta Martin Adán.
A parte de la literatura también soy pintor y hace más
de un año pinté una colección de escritores jóvenes, son 11 en los que
participan: Rodolfo Moreno, Rodolfo Ybarra, Rafael Altamirano, Marco Martos y más. Menciono esto porque ante
esta breve colección de escritores peruanos jóvenes hice una excepción en que integré
a la muestra un poeta al que siempre he admirado mucho. Y es la figura de
Martín Adán. Lamentablemente me olvidé de llevar su
cuadro a nuestro recital que justamente fue en honor a él. Me hubiera gustado
que este ahí. También nos olvidamos la banderola de nuestro grupo literario.
Esto significa que volveremos hacerle un segundo homenaje a nuestro poeta.
OLEO SOBRE LIENZO. RETRATO DEL POETA MARTÍN ADÁN AUTOR: Enrico Diaz Bernuy |
PABELLÓN SAN AFLAVIO |
Participaron de Poetalica:
Katherine Castelo
Miguel Fegale
Enrico Diaz Bernuy
Edgar Cooper
Claudia Montani.
Invitado: Jhon Acme.