PIERO BRIONES
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MUJER, vislumbré tu escritura interna por un segundo:
/ Prosa poética por Piero Briones /
Caminas con el mismo garbo de soltura y viveza,
llevas la misma mochila de flores y espinas dibujadas en los tejidos de los
bordes. Pisas fuerte y avanzas con las mismas lágrimas ocultas que rozan la
piel de tus entrañas, provocas el mismo efecto agonizante con tu sugerente
sonrisa de niña inquieta. Posees la misma clave de la felicidad aunque no lo digas ni por una amenaza irresistible
de esas que acostumbras recibir, abrazas a los mismos amantes aprendices de tus besos magnéticos, mantienes tu simpatía y tu crueldad infantil de los años inocentes. Acumulas el rocío de la atmósfera del mundo y das retazos de gotas a los hombres del inframundo, sombreas con tus olores el aura de los mortales multicolores, premeditas las oraciones de tus sueños, corres tras un alba esclarecido luego de lo perdido en lo nocturno, sabes equivocarte y hasta cuando los miedos hablan en tus ojos las luces de tus pupilas silencian a las bocas envidiosas hambrientas de devorar tus ojos, cual cuervo asechando a su presa. Acaricias con tus yemas las pieles que han tocado otras pieles como si fueran puras, eres enemiga acérrima del razonamiento por derecho intrínseco y navegas, vuelas, corres, y quemas en las profundidades de los elementos naturales, juegas en la seriedad del incontrol que bien conoces. No perteneces al amor, sino al universo y persigues a las estrellas sin perseguirlas, generas colisiones entre planetas sin saberlo, tan sólo sabiendo que culminará un ciclo para empezar otro, y cargas recuerdos y descargas la memoria para crear nuevos recuerdos desafiantes como un arma en pleno relleno de balas agridulces. Tu cariño es inconmensurable a tal punto de convertir lo execrable en lo perdonable. Tu escritura es frágil, intuitiva, y sarcástica, eres un sabio en las carnes de una doncella, y proyectas el mismo misterio que un enigma, seduces a la luz esperanzadora y la mantienes quieta de su mantra exploradora, justo cuando va a estallar la rechazas, y narras un cuento repetido para mis oídos y yo lo exploro vislumbrándolo por un segundo en mi fantasía.....
de esas que acostumbras recibir, abrazas a los mismos amantes aprendices de tus besos magnéticos, mantienes tu simpatía y tu crueldad infantil de los años inocentes. Acumulas el rocío de la atmósfera del mundo y das retazos de gotas a los hombres del inframundo, sombreas con tus olores el aura de los mortales multicolores, premeditas las oraciones de tus sueños, corres tras un alba esclarecido luego de lo perdido en lo nocturno, sabes equivocarte y hasta cuando los miedos hablan en tus ojos las luces de tus pupilas silencian a las bocas envidiosas hambrientas de devorar tus ojos, cual cuervo asechando a su presa. Acaricias con tus yemas las pieles que han tocado otras pieles como si fueran puras, eres enemiga acérrima del razonamiento por derecho intrínseco y navegas, vuelas, corres, y quemas en las profundidades de los elementos naturales, juegas en la seriedad del incontrol que bien conoces. No perteneces al amor, sino al universo y persigues a las estrellas sin perseguirlas, generas colisiones entre planetas sin saberlo, tan sólo sabiendo que culminará un ciclo para empezar otro, y cargas recuerdos y descargas la memoria para crear nuevos recuerdos desafiantes como un arma en pleno relleno de balas agridulces. Tu cariño es inconmensurable a tal punto de convertir lo execrable en lo perdonable. Tu escritura es frágil, intuitiva, y sarcástica, eres un sabio en las carnes de una doncella, y proyectas el mismo misterio que un enigma, seduces a la luz esperanzadora y la mantienes quieta de su mantra exploradora, justo cuando va a estallar la rechazas, y narras un cuento repetido para mis oídos y yo lo exploro vislumbrándolo por un segundo en mi fantasía.....
Piero
Briones
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